Las sesiones son completamente individuales, y si lo deseas puedes venir acompañada por tu pareja o una persona de confianza.
En nuestra primera sesión de valoración, sobre la semana 20, haremos un estudio detallado de tu postura y suelo pélvico, y juntas, realizaremos una tabla de ejercicios ESPECÍFICOS para ti. Trataremos igualmente, todas aquellas patologías asociadas al embarazo, como ciática, dolores de espalda, piernas y/o abdomen, etc.
Si todo va bien, nos volveremos a ver a partir de la semana 33 o 34. Aquí trabajaremos;
No te preocupes, porque para las mamás con horarios difíciles, o que vivís lejos de la clínica he sacado mi nuevo curso: Embarazo y Parto en Confianza.
Podrás obtener toda la información aquí.
No hay número de sesiones predeterminadas, todo será en función de tus necesidades, que se consensuará nuestro seguimiento. Aunque lo normal son:
Si tienes una molestia o preocupación, nos veremos las veces necesarias para solucionarlo .
Sí, hay grupos reducidos de futuras mamás que se preparan físicamente para esta larga maratón de 9 meses. Más info aquí.
Te invitaré a participar en ellos, además de las sesiones individuales.
En ellos, trabajaremos físicamente todo nuestro cuerpo, para sentirnos ágiles y con fuerzas para nuestra llegada a meta. Así evitamos algunos de los síntomas más frecuentes del embarazo; cansancio, piernas hinchadas, falta de movilidad,… y nos preparamos para tener una recuperación postparto mucho más rápida.
No, las técnicas no pueden dañarlo ni a él ni a ti.
Si tienes alguna duda sobre tu caso en particular, te animo a escribirme aquí y lo hablamos.
Por supuesto, esa decisión es solo tuya. Igualmente tu acompañante podrá esperarte en la sala de espera si lo desea.
Claro que sí, tu bebé es bienvenido.
Para tu mayor comodidad, lo mejor sería que alguien te acompañase y estuviera con él, mientras estamos en consulta. Tu estarías más tranquila.
Me temo que no, lo sentimos. Las compañías no pagan mucho, con lo que no podemos dedicarle la el tiempo necesario a nuestros pacientes.
Por eso hemos decidido, no aceptar seguros, y ofrecer una atención de calidad, con tiempo suficiente para el tratamiento manual.
Podemos realizarte una factura del tratamiento, para que seas reembolsado por tu compañía.
Realizamos una historia clínica muy detallada (conocer tu parto, y como estabas antes y ahora), hacemos una exploración tipo ginecológica sin generar ningún dolor para valorar los distintos tejidos y poder determinar el tratamiento más adecuado para tí. Siempre en un clima íntimo, y tranquilo. Pongo especial atención a la musculatura de la faja abdominal y del suelo pélvico, ya que son las partes más vulnerables.
Si tienes mucho dolor, no te preocupes, iremos con calma, y lo abordaremos con el más profundo respeto para que puedas empezar a sentirte mejor cuanto antes.
Mediante un tratamiento creado para tí, estos serán nuestros objetivos:
Incontinencia urinaria, fecal o gases.
Disminución de la sensibilidad en las relaciones sexuales.
Sensación de peso vulvar.
Dolor en cicatriz.
Diástasis o separación de los rectos.
Dolor en el coxis y pubalgias.
“El tratamiento de la cicatriz será de gran relevancia para evitar fibrosis y futuras molestias físicas y estéticas, pero igualmente el tratamiento del suelo pélvico ya que el embarazo es igualmente un factor de riesgo para toda la musculatura perineal. En ocasiones, mis pacientes refieren una disminución de la movilidad y otras veces incluso dolor.”
Trabajamos con ambas técnicas o metodologías. Tanto los hipopresivos como el tronco, nos ayudarán a mejorar el estado de tu zona abdominal y suelo pélvico a través del control de la postura, la respiración, el ejercicio, etc.
Pero he de decirte, que valoraré tu caso y veremos juntas si esto es necesario para ti o no.
Cada mujer es única.
Sí, hay grupos reducidos de mamás recientes que se recuperan físicamente tras sus 9 meses de gestación. Aquí más info.
En ellos, trabajaremos con abdominales hipopresivos, pilates, el tronco,…siempre respetando el suelo pélvico para no lesionarlo.
Por supuesto, esa decisión es solo tuya. Igualmente tu acompañante podrá esperarte en la sala de espera si lo desea.
Claro que sí, tu bebé es bienvenido.
Para tu mayor comodidad, lo mejor sería que alguien te acompañase y estuviera con él, mientras estamos en consulta. Tú estarías más tranquila.